El segmento de super yates de expedición pronto recibirá un nuevo miembro intrépido y único. Los creativos diseñadores de Bannenberg & Rowell Design concibieron el explorador Kilkea, de 270 pies, para viajar a los rincones más remotos de la tierra, mientras provee confort a bordo durante semanas. El casco está siendo construido actualmente en un astillero en Vietnam, propiedad de la constructora noruega Vard.
Kilkea se basa en el casco del Vard 1/08, una plataforma diseñada para uso fuera de la costa. Dicho casco de acero con una clase ICE-C le permitiría operar en condiciones de hielo moderadas. El yate está diseñado para viajar por un mes sin tener que tocar tierra. Sus bajos rangos de consumo de energía dejarán una huella menos contaminada y proveerán un largo alcance.
Bannenberg & Rowell agregó el confort de un súper yate a las cubiertas inferiores con departamentos, suites para huéspedes y salones que forman parte de la cubierta del puente frontal. Kilkea cumplirá con las regulaciones del Passenger Yacht Code y acomodará hasta 36 huéspedes.
Los planes preliminares incluyen un helipuerto y hangar, piscinas interiores y exteriores, campo de fútbol, pero es flexible ante su diseño, pues la manga de 59 pies deja las posibilidades abiertas para poseer cubiertas centrales. Inclusive existe la posibilidad de incluir un muelle para submarino y un cuarto de observación bajo el agua.
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Kilkea ofrecerá las tecnologías de navegación más nuevas, como sistema de posicionamiento dinámico que lo mantiene en un lugar a través de GPS, así como palanca de mando para facilitar la navegación y el atraque. Un sistema de propulsión con dos unidades azimuth permitirán tener mayor capacidad para dar la vuelta. Los arquitectos navales del barco proyectan que alcanzará una velocidad máxima de 15.4 nudos y una cómoda velocidad de crucero de 12 nudos. Cuesta $62 millones de dólares.