Este auto volador, rojo Ferrari, de Samson Sky está muy cerca de conquistar los cielos

No, Ferrari no ha anunciado un plan para poner a volar ninguno de sus coches, sin embargo, hay una empresa llamada Samson Sky que está a punto de conquistar los cielos con un auto volador que nos recuerda, al menos por su vibrante color, a los vehículos que llevan por logo el clásico Cavallino Rampante.

Se trata del modelo Switchblade que parece estar tan cerca de salir al mercado que ya ya ha sido pedido o apartado por alrededor centenas de clientes procedentes, sobre todo, de California y Florida.

auto volador
Imágenes: Samson Sky

El auto volador de Samson Sky

El auto volador de Samson Sky, que lleva 14 años en desarrollo, se encuentra prácticamente listo para su próxima serie de pruebas. Y es que recientemente, la Administración Federal de Aviación determinó que era seguro volar en él, por lo que podría ser cuestión de semanas para que salga al mercado.

Video Recomendado

De acuerdo con Robb Report US, esta aeronave fue diseñada para ofrecer todas las comodidades de un automóvil de lujo, incluido su sistema híbrido de propulsión eléctrica, para un viaje tranquilo en el aire.

Con capacidad para dos personas, el Switchblade de Samson Sky puede alcanzar una altitud máxima de 16,000 pies, con una velocidad de crucero de 160 mph. Esa altura es lo suficientemente baja para que el piloto y el pasajero disfruten de la vista. Las alas, que se pliegan a los lados, cuando aterriza, permiten que la aeronave se mueva del suelo al aire con una transición perfecta.

“[La tripulación] se quitó su ‘Estoy haciendo investigación y desarrollo’ y se pusieron sus sombreros de tripulación ‘Soy un vuelo de prueba’, y creo que eso realmente marcó la pauta para todo lo que siguió”, dijo Sam Bousfield, director ejecutivo de Samson Sky e inventor del vehículo.

Cuando el Switchblade de Samson Sky llegue al mercado, tendrá un precio de venta de alrededor de 170,000 dólares. Actualmente, la compañía permite a los clientes reservar su automóvil por adelantado con un depósito de 2,000 que vence 45 días después de que el primer automóvil despegue.