Lazzarini creó un increíble puerto flotante en el que todos querrán atracar

Es bien sabido que un puerto marítimo debe estar en tierra, pero no necesariamente con el nuevo concepto de yate de Lazzarini, que ha creado un diseño innovador multiusos que funciona como astillero de pequeñas embarcaciones para prestar servicios en alta mar.

El yate mide 100 metros y lleva por nombre Saturnia, su silueta es geométrica con líneas llenas de ángulos. El estudio usa la fibra de carbono seca como material principal para su creación y según el fabricante lo hará un 50% más ligero que las embarcaciones de un tamaño similar.

La pièce de résistance es su puerto privado ubicado a la mitad del barco y su acceso es a través de dos grandes aberturas, a cada uno de los lados, con puertas que se levantan automáticamente cuando se necesita. Igual que un muelle permite que las embarcaciones vayan y regresen e incluso los dejará atracar al interior, bueno, solo si mide menos de 5 pies.

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En el interior se extiende por cinco pisos más una antena en la azotea, el diseño una vez dentro presume techos altos y grandes ventanas para que te sientas en total conexión con el océano, aunque se puede personalizar dependiendo de tus necesidades, ya sea que lo quiera para llevar a muchos invitados o que sea algo más personal.

Como era de esperar, Saturnia viene con un amplio menú de amenidades para una lujosa estadía en alta mar, eso incluye varias piscinas y áreas para comer al aire libre, una plataforma de lanzamiento para eVTOL y un salón con fondo de vidrio para que te sientas sobre el agua.

Lazzarini agregó una potencia híbrido a la embarcación, los motores diesel duales y el sistema de chorro de agua electrónico central le dan al barco una velocidad máxima de 30 nudos y menos emisiones.

Fotos: Lazzarini, Saturnia

Lazzarini nos tiene acostumbrados a grandes embarcaciones con forma de cisne o tiburón, siendo Saturnia su diseño más ‘docíl’ pero no por eso el menos innovador. El costo de construcción de la embarcación es de 300 millones de dólares por un tiempo de espera de 2 años y medio para poderle ver en el mar.