Maurizio Ferrari llevaba ya unos años trabajando para Lamborghini, pero la Guerra del Golfo había dado un duro golpe a la industria automovilística y prácticamente todos los pedidos se habían cancelado, fue en ese momento, 1991 para ser exactos, cuando recibió una llamada de Horacio Pagani y así fue como comenzó Pagani Automobili.
Juntos habían trabajado en la fabrica de Lamborghini y desde ese entonces Pagani tenía la visión de crear deportivos. Para 1992, Horacio ya había conseguido un terreno en donde posicionar la marca, mientras que Ferrari trabajaba en un proyecto, el que más adelante se convertiría en el Zonda.
Pagani Automobili se estableció oficialmente para 1998, pero como ya dejamos entrever la historia comenzó desde hacía tiempo, incluso muchos años atrás, cuando Pagani, como un niño de 10 años en una pampa argentina tallaba madera de balsa para hacer pequeños modelos de coches.
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“Vi nacer el sueño de Horacio, hablaba de eso todo el tiempo. Me mostró sus dibujos, sus maquetas de autos, sus revistas. Le fascinaban los coches Gran Turismo, los que corrían las 24 Horas de Le Mans. Eso fue todo lo que pensó, y no solo dijo que lo haría, sino que lo haría en Módena, la tierra de los motores” dijo Hugo Racca, amigo de Horario Pagani.
La fábrica se convirtió no solo en el lugar en donde se ideaban y construían algunos de los hipercoches más bellos del mundo, sino en un taller en donde la creatividad unía y donde las personas comparten sus habilidades e ideas y unen la belleza con la mecánica.
La innovación es otra de las grandes fuentes de inspiración. Gracias a la investigación en materiales compuestos y tecnologías la compañía puede trabajar con aleaciones y componentes de aluminio para fabricar a partir de ahí hipercoches mecanizados.
Pagani ve el tiempo como un elemento vital del deseo, una característica esencial para una marca que basa su filosofía en inspiraciones y deseos. Durante el tiempo en el que el hipercoche se construye, el cliente imagina el día en que conducirá su auto y también el proceso de creación, personalizándolo junto a los diseñadores y técnicos.
Algo vital para la empresa es no juzgar sus autos bajo un factor simple de rendimiento como lo es la velocidad. Los autos por supuesto son rápidos, pero el desafío es hacerlos perfectamente seguros y cómodos para ser disfrutados por personas normales y no solo conductores profesionales.
Con este propósito de mejora en materiales y compuestos, Pagani invirtió 14 millones de euros, lo que representa el 11% de su facturación, en 69,400 horas de investigación y desarrollo en 2022.
En estos 25 años Pagani Automobili ha construir el Zonda C12 (1999), Zonda S 7.3 (2002), Zonda Roadster (2003), Zonda F (2005), Zonda Roadster F (2006), Zonda Cinque (2009), Zona Cinque Roadster (2009), Zonda R (2009), Zonda Tricolore (2010), Huayra (2011), Zona Revolution (2013), Huayra BC (2016), Huayra Roadster (2018) y el Utopía que ya está en camino.
Su 25 aniversario será celebrado en el centro de Módena del 16 al 18 de junio, presentando todos los modelos que han hecho hasta ahora, con la música de Mario Biondi y una fiesta llena de sorpresas.