La antigua sede de Gucci en Londres acaba de cotizarse por 66.6 millones de dólares o en alquiler por alrededor de 48,400 dólares a la semana, informa Bloomberg. La propiedad de Grafton Street, ubicada en el vecindario Tony Mayfair de la ciudad, se remonta a 1769 y también fue el hogar de un Lord High Chancellor británico.
La propiedad palaciega, que ha sido objeto de una lujosa restauración, cuenta con ocho habitaciones, piscina, jardín de invierno, gimnasio y sala de cine, entre otras comodidades. Los interiores se distribuyen en sótano, semisótano, bajo y cuatro plantas altas.
El palacio, que fuera sede de Gucci en Londres fue diseñado por el arquitecto Sir Robert Taylor en un estilo neoclásico: así que puedes imaginar techos de pan de oro de 20 pies de altura, chimeneas georgianas y piscina de inmersión revestida de mármol.
Un edificio histórico la antigua sede de Gucci en Londres
Aunque ha sido restaurada, el legado de la mansión sigue siendo tan histórico como el de sus antiguos habitantes. En un momento, fue la conocida residencia de Lord Brougham, un estadista británico del siglo XIX que se convirtió en Lord High Chancellor en 1830.
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En 1998, se comnvirtió en la sede de Gucci en Londres, tres años después de nombrar director creativo al diseñador estadounidense Tom Ford.
La decisión de trasladar la sede de la casa de moda italiana de Milán a Londres provino de Invescorp, que asumió la propiedad de la empresa en 1994.
El fondo de inversión quería distanciar la marca del asesinato de Maurizio Gucci a manos de su ex mujer en 1995. En un intento por comenzar de nuevo, el palacio de Londres se convirtió oficialmente en la nueva sede de Gucci en Londres y se sometió a una renovación de 24 meses. La construcción finalizó en 2000.
En la actualidad, lo que solía ser la sala de reuniones y sala de juntas principal de Gucci es ahora el comedor del primer piso de la casa. El segundo y tercer nivel alguna vez sirvieron como oficinas para el equipo de relaciones públicas, el departamento de TI y otro personal de Gucci. El cuarto piso era el espacio de trabajo del ex director ejecutivo, Domenico De Sole; tiene un solárium contiguo y techo abovedado con vigas.
“La antigua mansión de Gucci, la sede mundial de la marca, es ahora la mejor casa de Mayfair actualmente en venta o alquiler. Es aquí donde Tom Ford y Domenico De Sole entretuvieron a Alexander McQueen, Anna Wintour y François Pinault y donde el Lord Canciller Lord Brougham entretuvo a la Reina Victoria y al Duque de Wellington”, dijo Gary Hersham, director fundador de Beauchamp Estates, la firma que ha sido nombrada para vender o arrendar la mansión.
Si los próximos residentes del palacio agregarán un nuevo capítulo a su rica historia es una pregunta abierta. Sin embargo, una cosa es segura: pagarán mucho más por la oportunidad de lo que pagó Lord Brougham.
Nota publicada anteriormente por Abby Montañez en Robb Report US.