El príncipe heredero Mohammed bin Salman no quiere que nadie dude que Arabia Saudita es la ciudad del futuro, aún si para lograrlo necesita invertir 500 mil millones de dólares construyendo los rascacielos gemelos más altos de todo el mundo.
Todo forma parte de NEOM, una ciudad del futuro que estará ubicada en una de las zonas más despobladas del país extendiéndose desde la costa del Mar Rojo hasta el desierto. Los dos edificios que albergarían espacios residenciales, comerciales y oficinas complementa el plan que se anunció el año pasado sobre construir una serie de desarrollos conectados por un tren subterráneo de alta velocidad.
Hasta ahora, la instrucción es diseñar un prototipo de media milla de largo, de avanzar al 100%, cada una de las estructuras superaría por mucho a algunos de los edificios más altos del mundo, incluyendo el Burj Khalifa en los Emiratos Árabes Unidos.
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Pero como dijimos, tanto el rascacielos como el sistema de trenes subterráneo forman parte de un proyecto mucho más grande. El plan final es crear en Arabia Saudita NEOM, en un estado semiautónomo de alta tecnología que se acerque al futuro reinventando la forma en la que vemos la vida urbana, diversificando la economía y logrando que esta no dependa en su totalidad de la venta de petróleo.
La columna vertebral del NEOM será The Line, una ciudad lineal con un costo proyectado en 200 mil millones de dólares, eso hasta que se contempló la creación de los rascacielos.
Sin embargo, aún le esperan muchos retos a NEOM y The Line, pues se han planteado muchas dudas respecto al proyecto, esto a partir de que otros planes similares destinados a impulsar la diversificación económica no lograron despegar. El proyecto continuará, pero será construido en etapas según la demanda y popularidad.