Ni reloj ni caja musical, simplemente una encantadora tortuga mecánica ideal para regalar

Encantadora y pequeña, esta escultura en forma de tortuga esconde diversas sorpresas que son el resultado de un sistema micro mecánico como el que sostiene a la relojería, sin embargo, no se trata de un reloj, ni de una caja musical, por más que el sonido también forme parte de su esencia.

RelacionadaSeis accesorios para tu iPhone de tus firmas de moda favoritas

Es, eso sí, la creación artística que Maximilian Büsser & Friends (MB&F), un laboratorio dedicado a diseñar y elaborar artesanalmente pequeñas series de relojes conceptuales, desarrolló en colaboración con Reuge: productor por excelencia de cajas de música, desde hace 150 años.

Video Recomendado

Un excelente detalle para regalar en estas fechas que, bajo el nombre de Kelys and Chirp, une las figuras del mencionado y longevo reptil con un diminuto y sonoro pájaro.

La pieza más visible es Kelys, una tortuga de latón rodiado con acabados pulido, satinado y graneado, de 24 centímetros de largo x 16 de ancho y 8 de alto.

Con gemas de ónice negro en los ojos, esta figura emula el movimiento de la criatura original, a través de unas pequeñas ruedas que tiene debajo. Como un detalle de seguridad, el mecanismo está programado para detener su avance en cuanto se percibe cerca de un borde.

Pero más allá de este andar, sus 480 componentes dotan a esta figura de otras funcionalidades que la convierten en algo muy especial.

Y es que de la parte superior del caparazón sale un pájaro autómata volador (Chirp), hecho de oro blanco de 18 quilates, el cual mueve sus alas y cola, antes de abrir el pico y ponerse a cantar, para refugiarse otra vez.

De nuevo, aquí se implementa un mecanismo de seguridad para que, en caso de que alguien intente cerrar la pequeña apertura mientras el pájaro autómata está en medio de su canción, éste esquive automáticamente la amenaza.

 

RelacionadaCinco whiskies para cerrar 2017 con broche de oro

El pase de diapositivas requiere JavaScript.

Aunque Kelys & Chirp pueda parecer una obra relativamente sencilla comparada con un reloj con complicaciones, sus 480 componentes (suficientes para una repetición de minutos) son prueba fehaciente de la complejidad del mecanismo.

El lujo en sus detalles, por otro lado, la convierten en una pieza artesanal de lujo que no sólo de verá muy bien en tu casa, sino que evocará el cariño que sientes por esa persona especial.

 

MB&F