Los días de los carritos eléctricos de golf podrían estar contados, luego de cristalizarse la innovadora idea del dos veces campeón del Máster y uno de los cinco mejores en la historia del deporte de precisión, Bubba Watson, quien desarrolló, en colaboración con Oakley, el BW-Air, el primer buggy que vuela.
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Habituales de los campos de golf, los típicos carritos eléctricos empezaron a utilizarse para transportar a aquellos jugadores que, por edad o limitación física, no podían andar grandes distancias entre cada hoyo.
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Desde entonces, lo que en principio era un mero transporte, se ha ido modernizando e incorporando tecnología y nuevos accesorios, hasta este punto en que podrían ofrecer a los golfistas una visión del campo distinta y un nuevo modo de desplazamiento, por el aire.
Y es que este Bubba’s Jetpack permite a los golfistas volar literalmente a través del campo de juego, equipado con un motor rotativo a medida de 210 caballos de fuerza que le permite escalar hasta 3,000 pies con velocidades de aire de hasta 46 millas por hora.
Cuenta con las dimensiones adecuadas para transportar todo lo que se puede mover con los carritos tradicionales: palos, portabotellas de arena y todo lo demás que necesita para una gran ronda.
Sin embargo, para poder utilizarlo, los golfistas deberán realizar un entrenamiento a fin de disminuir riesgos, entendiendo su funcionamiento para obtener una certificación.
La probada tecnología de Martin Aircraft Company, líder mundial en desarrollo y comercialización de jetpack, respalda este invento que buscará convertirse en el carrito de golf más avanzado técnicamente del mundo.
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Es producto de años de investigación por parte de Bubba Watson, quien anteriormente ya había diseñado un hovercraft que permitía deslizarse por los campos de golf, sorteando cualquier superficie, ya que el aerodeslizador era capaz de moverse incluso sobre el agua.
Sin embargo, más allá de una transportación más práctica, el nuevo invento va más allá. Y brinda al jugador una ventaja: la de poder visualizar su próxima jugada desde la perspectiva de un pájaro.