El nuevo inodoro espacial de la NASA, que costó 23 mdd, es el más caro de la galaxia
Date: 11-26-19 Location: Bldg. 241 - Acoustic Testing Area Subject: ISS Universal Waste Management System, Unit 1 during Acoustic Testing Photographer: James Blair

Alguna vez te has preguntado, ¿cómo hacen los astronautas para ir al baño? Millones de personas sí lo han hecho a través de Google y en realidad la misma NASA sigue trabajando en ello, una prueba es su nuevo inodoro espacial que, con un costo de producción de 23 millones de dólares se posiciona como el más caro no sólo del mundo, sino de la galaxia.

El aparato, que ha sido nombrado Universal Waste Management System (UWMS), se instalará en la Estación Espacial Internacional y servirá como prueba para futuras misiones a la Luna y a Marte.

El nuevo inodoro espacial

El nuevo inodoro espacial de la NASA es 65% más pequeño y 40% más liviano que el actual y puede servir a tripulaciones más grandes.

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Cuenta con un diseño avanzado que incluye un embudo de orina y un asiento que fue diseñado para brindar mayor comodidad a las mujeres miembros de la tripulación.

Asimismo, posee un separador de doble ventilador de titanio impreso en 3D, que genera un fuerte flujo de aire el cual ayuda a llevar la orina y los desechos de los astronautas al inodoro, en lugar de la gravedad.

El inodoro de titanio de pesa alrededor de 45 kilos y mide solamente 71 centímetros de alto, especialmente diseñado para caber en las cápsulas Orion de la NASA que llevarán a los astronautas a la luna en unos pocos años.

Los residentes de la estación espacial lo probarán durante unos meses y si todo sale bien, quedará listo para las operaciones regulares.

El nuevo inodoro espacial se colocará en su propio cubículo junto al antiguo que data de 1990 y está ubicado en el lado estadounidense de la ISS.

Para completar la historia es importante decir que el papel higiénico, las toallitas y los guantes se desechan en bolsas herméticas que se compactan en un recipiente de almacenamiento fecal extraíble.

La mayoría de estos recipientes se cargan en una cápsula que termina quemándose al volver a entrar en la atmósfera terrestre.