Salvatore Ferragamo empezó a hacer corbatas en 1973. En un principio se limitaban a estampados más tradicionales, pero rápidamente se dieron cuenta de lo exitosas y deseadas que eran sus creaciones y ampliaron un poco más el abanico de sus diseños hasta llegar a incluir patrones de insectos, deportes o animales.
La atención a los detalles es lo que siempre ha caracterizado a la casa de moda italiana y ahora potencian esta cualidad con un nuevo programa, para hacer corbatas a la medida. Así, el accesorio se produce completamente de acuerdo a los gustos del cliente y refleja a la perfección su personalidad.
El esquema de “Made-to-Order” comenzó a medidados de junio y cuenta con 11 estilos de corbata distintos, ocho estampados y tres jacquards (un diseño que se plancha en la tela). Se puede elegir entre múltiples colores (marino, azul claro, rojo, naranja, rosa o verde), largos (140 cm, 150 cm o 160 cm) y anchos (6 cm, 7 cm, 8 cm o 8.5 cm). También es posible solicitar un bordado de dos o tres iniciales en el reverso.
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El servicio de corbatas hechas a la medida está disponible en las tiendas de Ferragamo de Nueva York, Bal Harbour, Beverly Hills y Toronto. Tienen un costo de $250 dólares y vienen en una caja especial.