Omega ha creado al compañero perfecto para el reloj que llevamos en la muñeca. Con siluetas tradicionales y detalles estéticos inspirados en los guardatiempos clásicos de la firma, estos lentes de sol ya están disponibles en algunas de las boutiques de la marca alrededor del mundo.
La extraordinaria calidad de las gafas es posible, gracias a la alianza de Omega con la marca italiana Marcolin, que también ha fabricado lentes para marcas como Tom Ford y Balenciaga. Cada una de las piezas está hecha en Italia y reproduce a la perfección el ADN de la firma relojera, en un nuevo accesorio.
Tras una larga historia de éxito han salido de su zona de confort para explorar nuevas áreas de oportunidad, con las que francamente nos han sorprendido. Los lentes son anti reflejantes y anti rayones. Tienen detalles sutiles, con los que hacen referencia a los relojes, como los marcos con infusiones de metal, las bisagras en forma de coronas y los acabados en color negro, similares a los de la colección Dark Side de la firma relojera.
Para esta línea, crearon accesorios tanto masculinos como femeninos y cada uno de ellos está disponible en dos variaciones de color y tamaño.