El arte y el diseño han formado parte del ADN de Tequila 1800 desde 1975, cuando se dio la primera intervención de sus botellas a manos de artistas del momento. Desde entonces, sus botellas se han convertido en óleos en blanco, permitiendo el deleite no sólo al paladar, sino a la vista y los sentidos. Este año, la colaboración corrió por cuenta de Gary Baseman, artista americano reconocido por su trabajo en disciplinas como la ilustración, la animación, las artes plásticas y su peculiar estilo que combina la cultura pop con elementos vintage.

Para el lanzamiento de Tequila 1800 Colección edición 2016, Gary Baseman fue el invitado de honor al evento surrealista y sorprendió con un performance protagonizado por los personajes de la licorera, la sirena y la calavera. Además, entre nubes de papel y piñatas, edecanes, y botargas con la forma de los personajes salidos de la imaginación de Baseman, amenizaron la velada nocturna. De edición limitada a 100 piezas (únicamente 45 disponibles en México), la botella intervenida fue realizada en estaño y reúne elementos reconocidos de Baseman, quien ha logrado crear mundos mágicos alrededor de sus obras. Con respecto a la bebida, Tequila 1800 deleita con un elíxir de color dorado profundo, bien estructurado, de sabor a especias y un toque almendrado.

(1800tequila.com)

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