El Food Hall de Selfridges resguarda una botella que los amantes del gin podrían considerar un verdadero tesoro. Se trata de Watenshi, un ginebra japonés que se crea gota por gota.
La presión de aire está completamente controlada y la temperatura también. Esto, hace que la calidad de la bebida sea excepcional. Únicamente retienen el 1% de cada destilación y no se producen más que 36 botellas al año.
Esta edición limitada tiene un costo de $3,000 dólares y en Selfridges no hay más que una pieza en stock. Ahí la van a tener hasta navidad, a menos que alguien la compre antes.
La botella la hicieron los diseñadores Loris & Livia en conjunto con el joyero Antoine Sandoz y la etiqueta está elaborada por un maestro de caligrafía japonés quien marca cada una de ellas a mano.