Rémy Martin, más que un cognac, es una historia que nació en 1724 cuando el visionario joven viticultor francés empezó a vender esta bebida con su propio nombre. Al reconocer la excelente calidad del cognac, el rey Louis XV le dio permiso de plantar nuevas vides. Desde entonces nueve generaciones han formado parte de esta legendaria empresa.
La herencia pasó a manos de Paul-Emile Rémy Martin, quien vio nacer el primer cognac Rémy Martin Grande Champagne en 1830 y se encargó de llevar el producto familiar por todo Europa, Estados Unidos, Asia y el Pacífico.
En 1910 Paul-Émile Rémy Martin II se asoció con André Renaud, que más tarde se convertiría en el primer maestro bodeguero. Juntos lanzaron el Rémy Martin Fine Champagne Cognac VSOP, una mezcla de crus Petite Champagne y Grande Champagne.
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La calidad de la bebida llegó a ser tan elevada que en 1938 se le reconoció legalmente. Diez años más tarde, tomaron la decisión de elabroar el cognac exclusivamente con uvas procedentes de Petite y Grande Champagne, que le otorgan el balance perfecto de aromas añejos e intensos a este elíxir.
Desde entonces y hasta el día de hoy, Rémy Martin ha visto pasar a importantes personajes y maestros bodegueros que heredan los conocimientos de sus antecesores y que han enriquecido su legado.
A lo largo de estos 300 años han sumado sofisticados productos a esta familia, que el día de hoy se considera la epítome de la excelencia.
(http://www.remymartin.com/)