Por Mónica de la Torre
¿Se acerca el día del padre y aún no sabes que regalar? El mundo del vino tiene una amplia gama de opciones que no se limitan a una buena etiqueta.
1. Coravin.
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¿Alguna vez has tenido ganas de abrir una botella de vino y no lo has hecho porque sabías que no la terminarías y no quisiste desperdiciar el resto? ¿O probablemente tengas una colección de vinos, no estés muy seguro si alguna de tus botellas está ya en su mejor momento de consumo y no quieres correr el riesgo de abrirla antes de tiempo?
Tener un Coravin terminará con esos problemas. Es un gadget que permite servir vino sin necesidad de abrir la botella sacando el corcho.
¿Cómo? Este dispositivo posee una delgada aguja que perfora el corcho e inyecta Argón, gas inerte que evita la oxidación del vino y no lo altera en absoluto. Al insertar el gas, el líquido sale debido al aumento de presión dentro de la botella, que puede mantenerse cerrada gracias a la flexibilidad entre el corcho y el pequeño orificio que provoca la aguja.
El vino que se queda en la botella se mantiene en perfecto estado por meses, incluso por más de un año según pruebas realizadas.
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2. Una copa para todos los vinos.
Una de las cosas que pueden mejorar la experiencia de tomar un gran vino es poder beberlo en la copa adecuada, que le permita respirar, abrirse y expresarse plenamente.
Hoy por hoy existe una copa especifica para prácticamente cada vino según sus características; pero si no se cuenta con espacio para tener una gran cantidad de cristalería, se debe buscar una opción para poder servir cualquier tipo de vino.
Para mí, la mejor es Zalto Denk.Art Universal, la versión más elegante de la copa universal. Copas preciosas, sopladas a mano y avaladas por la calidad y lujo de Zalto, la casa Austriaca cuya tradición data desde el siglo XIV.
3. Sacacorchos de Dos Tiempos.
No en balde se le conoce como “Waiters Friend”, ya que es el sacacorchos más utilizado en la industria de la hotelería por meseros y sommeliers.
Se ayuda de dos tiempos o apoyos para sacar el corcho evitando así doblarlo más de lo necesario y minimizando el riesgo de ruptura.
Los hay desde los básicos (pero totalmente funcionales) como Pulltaps, hasta los bellísimos modelos artesanales de Laguiole, marca francesa especializada en cuchillería de lujo. Son un lujo bellísimo..
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4. Decantador.
El decantador es una pieza clave para un amante del vino. Ya sea que se busque trasvasar vinos jóvenes para oxigenarlos y ayudarlos a abrirse más rápidamente o para separar el sedimento que se presenta en algunos vinos, tanto por técnicas de elaboración (no filtrar) como por edad y evolución naturales del vino. Un decantador hará que nuestros vinos se abran, expresen todos sus aromas y estén listos para disfrutarlos en menos tiempo.
El decantador Cabernet de la casa Austriaca de cristalería Riedel, con 260 años de historia e innovación a sus espaldas, es una excelente opción si solo se contará con una pieza, ya que los decantadores, como las copas, se crean en diversas formas para diferentes vinos y algunos son autenticas obras de arte.
La limpieza correcta puede suponer un reto, por lo que vale la pena agregar las perlas metálicas de Riedel, “Bottle Cleaner”, para limpieza de decantadores.
5. AH-SO ó Sacacorchos de Mayordomo
Una de las situaciones más frustrantes a las que se enfrenta un apasionado de los vinos es que se rompa el corcho al abrir la botella.
Los tapones de corcho natural con el paso del tiempo pierden flexibilidad y se vuelven más vulnerables, el sacacorchos convencional perfora al corcho y lo somete a presión y fricción, por lo que los corchos más delicados en ocasiones no lo pueden soportar.
El Sacacorchos de Mayordomo está diseñado para este tipo de vinos, en vez de perforar el corcho, las dos láminas paralelas lo “abrazan” y crean presión en sus laterales para así deslizarlo suavemente al exterior.