Cada sorbo del mezcal Los Amantes sabe a tradición y artesanía. El nombre de esta bebida surge a partir de la leyenda de la diosa Mayahuel quien desobedeció a su abuela y se entregó por amor a Quetzalcóatl, acto de rebeldía que pagó con su vida. Más tarde, enterraron sus restos y los regaron con el llanto de Quetzalcóatl, dando pie al nacimiento de la planta del maguey.
Este elixir hecho 100% de agave se elabora en Tlacolula, Oaxaca. Cada paso, desde la cosecha del maguey espadín, hasta la destilación en alambiques de cobre y acero, se realiza con pasión y conocimiento heredado de generación. El arte acompaña todo el proceso, hasta llegar a la botella que es un diseño del artista Guillermo Olguín, inspirado en antiguas botellas de sifón.
Existen tres variedades de mezcal Los Amantes, cada una de ellas con personalidad propia.
Mezcal Joven
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De triple destilación con tonos frutales levemente ahumados y sabores cítricos.
Mezcal Reposado
Después de una doble destilación, reposa en barricas de roble francés de seis a ocho meses. Tiene aromas a café y caramelo.
Mezcal Añejo
Se añeja por más de año y medio en barricas de roble francés y tiene aromas ahumados a vainilla y frutos secos.
Para conocer de cerca esta bebida lo mejor que se puede hacer es visitar su destilería en Oaxaca y recorrer el museo vivo para después dejarse consentir en el área de degustación.