Después de ocho años de ausencia, el golf femenil de alto nivel vuelve a nuestro país con el MÉXICO Riviera Maya Open at Mayakoba, un evento que no sólo marca el retorno de la LPGA al país, sino que también representa un paso crucial hacia la construcción de un ecosistema sostenible para el desarrollo del golf femenil nacional.
Durante la conferencia inaugural del torneo, Gustavo Santoscoy García, director del certamen y CEO de GS Sports Management, y Luis Durán, CEO de RLH Properties, celebraron el éxito de la primera jornada, que superó las expectativas tanto en la respuesta del público como en la experiencia de las jugadoras.
“Este torneo no sólo marca el regreso del golf femenil de alto nivel al país, sino también el inicio de una nueva etapa para el deporte en México”, señaló Santoscoy, destacando además la participación histórica de ocho golfistas mexicanas en el field.
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Pero más allá del espectáculo deportivo, el torneo se posiciona como una plataforma para el crecimiento del talento joven.
Gracias al respaldo de la organización XUNTAS, enfocada en el desarrollo de golfistas juveniles, y al apoyo logístico de RLH Properties, se está gestando un entorno propicio para que las nuevas generaciones puedan formarse, competir y eventualmente debutar en el máximo circuito profesional sin salir del país. “Estamos creando un ecosistema de golf perfecto”, enfatizó Santoscoy.
LPGA, una visión a largo plazo
La visión a largo plazo es clara: el MÉXICO Riviera Maya Open at Mayakoba permanecerá al menos cinco años en este destino, pero el objetivo es expandir la presencia de la LPGA a otras regiones donde RLH tiene desarrollos, como Riviera Nayarit y Los Cabos.
“Elegimos la LPGA porque representa lo que queremos promover: una experiencia deportiva, turística y social de calidad”, comentó Luis Durán.
Ambos directivos coincidieron en que el golf femenil es una oportunidad única para proyectar a México no sólo como un país sede de grandes torneos, sino como un espacio donde el deporte, el turismo y el entretenimiento conviven armónicamente.
El retorno de la LPGA no es solo un torneo: es el inicio de una nueva era para el golf mexicano.