Muy pronto tu sueño de convertirte en el próximo agente 007 podría volverse realidad. La marca británica automotriz, Aston Martin, se alió con EON Productions para modificar un modelo DB5 y crear una legendaria pieza de colección que resultará idéntica al auto conducido por Sean Connery en la película de 1964 “Goldfinger”. La reproducción será prácticamente exacta al vehículo visto en pantalla a excepción de algunas cuantas mejoras.
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La nueva producción se limitará a sólo 25 modelos elaborados de la misma forma que aquellos realizados en los sesenta. Chris Corboul, supervisor de los efectos especiales de todas las películas de James Bond, vigilará de cerca el proceso de construcción para asegurar que cada coche sea perfecto.
El distinguido color Silver Brich del DB5 se mantendrá intacto para serle fiel al modelo original. En cuanto a artilugios, el vehículo contará con una matrícula giratoria con la que los conductores podrán despistar a perseguidores.
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De manera adicional, el auto podrá lanzar bombas de humo, derramar aceite sobre el pavimento e incluso sacar picos de las llantas para reventar las ruedas de criminales. Como si esto fuera poco, en el interior yacerán dos ametralladoras fijadas al auto, un teléfono con diseño retro e incluso un asiento eyectable mediante un botón rojo.
Por obvias razones, Aston Martin ha comentado que el auto no podrá ser conducido de manera legal en vías públicas.
Desde su aparición en Goldfinger, el DB5 se ha convertido en uno de los autos más emblemáticos de Bond. Este ha aparecido en diversas películas como Thunderball, Casi Royal, Skyfall y Spectre. Cualquiera que se haga llamar un fanático del agente secreto necesita esta joya automotriz en su vida.
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Si quieres hacerte de esta sensacional creación entonces será mejor que comiences a ahorrar. El precio por cada uno de estos modelos rondará los 4 millones de dólares y serán entregados en el 2020. Un modelo extra será subastado para la caridad.